Cambié de vida.

De identidad. Hola, pequeño. ¿Me encontraste? Espero que así haya sido. De lo contrario, una lástima. Y no, no puse esa portada para herirte, simplemente es un recuerdo llano de que todos me miran... pero a nadie miro yo, cariño. Muy tarde para decirte esto, supongo. De igual manera, hoy no respondiste. No importa, corazón, eran buenas nuevas, pero si no estabas dispuesto a oírlas, poco caso tenía te las dijera. Creo que estoy saliendo del hoyo. Hoy salí a comprar con mis amigos. Incluyendo a tu pequeño enemigo. Me fue bien en los exámenes... me siento viva de nuevo. Y es que espero superar esto más pronto de lo que tú puedas hacerlo, para que al voltear y ver que tienes a alguien más, esa puñalada sólo me deje moribunda pero no me mate. Resistir es la segunda mejor cosa que sé hacer, después de hacer todo lo contrario a lo que realmente quiero expresar.