martes, 27 de octubre de 2020

El arte de ser.

Ya no importa en absoluto quien soy o quien solía ser. 


Hace no tanto ni tan poco, conseguí un curso de acuarelas (aún sin tenerlas ja, ja) pero, hasta hace un par de días, es que pude conseguirme mi cuaderno y acuarelas especiales. Nos piden que comentemos en un foro, pero soy lo suficientemente tímida como para no querer hacerlo. Pero sí tengo las ganas de compartir quien soy ahora, principalmente con mi yo que seré en unos días, meses, años... Vidas.


En fin. Me gusta dibujar... mujeres, más que nada. Michis. Comida, comida, comida. Cosas cute y tiernas. Sencillas. Creo en el dibujo funcional más que en el dibujo estético. Mientras de la idea, sirve. Mis inquietudes son cosas más del futuro y del mundo que de la realidad en sí. Este es mi foro. Esta es mi vida. Escogí este curso porque es lo que me gusta, es una técnica muy llamativa, simplifica la maravilla que es el color.

sábado, 25 de julio de 2020

De lo que soy capaz y ni siquiera lo creo.

Buenas, buenas mis queridos y probablemente inexistentes lectores, en esta magnífica velada en la que estoy siendo acompañada por el par de peluditos amigos que han decidido llegar a mi vida (Dante y el buen Pana), les confirmo algo que muchos saben: ya no escribo como antes.

Va desde el toque, mi encanto, no lo sé, hay algo en mí que siento muy, muy... diferente. No es que haya perdido las ganas o algo por el estilo, simplemente ya no es lo que solía ser, y no sé si tomarlo como una evolución o adaptación de mi texto o un retraso de mis facultades como escritora. Entre que son peras o son manzanas, la vida sigue, y va tan rápido que me pierdo en el infinito d e su inmensidad y sólo me queda mirar a la explanada del tiempo en lo que se me escurre la mente entre espasmos de realidad y una abrumadora existencia casi o totalmente insignificante.

No es por hacerme la interesante, pero hace mucho que siento que mi vida carece totalmente de ese sentido común de supervivencia o lo tengo en exceso que ya hasta aprendí a convivir con ello. Mirar al frente y seguir. ¿Es eso vivir, Dios?

Tengo nuevas notas que regalarles, a las personas que quizás les importe un poco:

"Dios nos dio el temor para que no pudiéramos dormir solos".

"Hay tantos momentos de mi vida en los que no quisiera llegar a casa, sólo quisiera que el tiempo de congelara... ¿qué hizo que pasara de un sufrimiento a otro?"

Creo que... es suficiente por hoy.

miércoles, 26 de febrero de 2020

Hola, hola de nuevo.

Pues nada, aquí estoy nuevamente, fastidiando poco o nada a mis más íntimos lectores.

El pasado fin de semana, me fui de jerga con una amiga cercana, nuestro destino fue un pueblo donde no hay señal y todo lo que existe es gloria pura en forma de aire fresco, silencio absoluta y comida sumamente deliciosa.

El caso es que hice algunas pequeñas anotaciones sobre mi ligero encuentro con otra realidad totalmente alterna a la mía, y quería compartirlos con los que gusten leerlos:

"Haz que el crujir de tu hamaca suene más que tus feos pensamientos"
Este lo pensé cuando estaba a punto de quedarme profundamente dormida y todo lo que oí fue unos chillidos provenientes de ella... me hicieron calmarme totalmente.

"Nunca te conviertas de la amante a la esposa, porque dejará de buscarte y se conseguirá una nueva"

"A veces, el sólo ocuparte de no morir (o de hacerlo un poco menos) es totalmente gratificante, válido e idóneo para todos [tí]"

"Una casa no necesita muchas más cosas [lujos] que para ser una casa más completa para sí misma como para cualquier otra"

"De niños, no teníamos miedo a las decisiones, si a las [sus] consecuencias. Sino, más bien, buscábamos soluciones desesperadas a nuestros problemas. ¿Será eso [el miedo] lo que nos detiene de vivir a los adultos?"

"Creo que lo primero que notan las personas en mis ojos, es que tengo sueño. Y no me parece algo triste."

"Ya sé porqué los antiguos filosofaban: No tenían nada más qué hacer".

"La ciudad es acelerada y desenfrenada. El campo es honesto, amigable y pasmado."

"Aseveraciones severas y lo que pienso de ellas".

"¿En qué momento nos volvimos tan cerrados que necesitamos un mundo [cuarto] propio?"

"¿Cómo temblar cuando ya hay tanta fragilidad a mi alrededor?"

"A veces se sintiera como si estuviera entre fantasmas..."


Otras cosas tristes que escribí poco antes, fueron:

"Me hubiera encantado despedirme de tí. Como no tienes idea. Miro a la ventana y sólo te veo pasar y caminar... Sonriendo. Me es difícil, pero algún día podré verte y sonreír de nuevo. Estoy segura."

"A veces, cuando la muerte escurre entre tus dientes y se dispersa por la comisura de tus labios, no siempre debes cerrarle la oportunidad de demostrarte que se vea a través de tí. No debes impedir siempre que se vayan como cascada aquellas lágrimas que te hacen sentir como el agua, fluyendo en la vida, flotando como un globo desubicado y sin rumbo. Sólo siendo un ser de luz, energía y un flujo de... algo.

Cuando me miro en el espejo, no me veo a mí, sino a algo más. A alguien más, que  viste como yo, sonríe a espaldas mías de forma muy similar a la mía, pero no soy yo... Me siento atrapada en aquel reflejo momentáneo, pero poderoso. Siento como sus pupilas se encajan en las mías, mi corazón palpita rápidamente y todo lo que puedo hacer es esconderme en mis pensamientos, y aquel ser escurridizo, sólo se aleja, tomando mi forma, pero no mis pensamientos ni mis sentimientos. Se aleja, con una sonrisa, y yo me quedo en casa, sentada, viendo como la vida se me pasa en un montón de escombros que me atrevo a llamar "mi persona".

martes, 28 de enero de 2020

He perdido la huella, pero no el toque, cariño.

Ya van poco más de 5 años que empecé esta travesía mágica por el mundo del blog: una forma de expresión liberal donde puedes escribir, ver, observar, leer, publicar... Vaya, de todo. Donde compartes TODO.

¿Qué les digo? A poco de tener una catársis masiva nuevamente, me encuentro aquí, regresando a lo mismo, pero sin estar afligida. ¿Pero, cómo, Eloisa? ¿¿¿¡¡¡CÓMO PUEDES ESCRIBIR ALGO AQUÍ SIN NECESITARLO!!!?? Sin estar... triste, blue. Azul.

He olvidado un poco, quizás más por pereza que por tiempo, la edición de la página, de la entrada, de la fuente, de la separación... Meh.

Me doy cuenta que mi único dolor siempre fue no amarme a mí misma.